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A pesar del esfuerzo denodado de los combatientes, el fuego avanza desde hace más de diez días en la Reserva Corazón de la Isla ubicada en el centro de la provincia de Tierra del Fuego, al norte del Lago Fagnano, a pocos kilómetros de Tolhuin, y ya llegó a tierras productivas. Ayer, pasada la medianoche las llamas atravesaron los límites de la estancia Los Cerros, afectando también la zona productiva.
“Lamentablemente para nuestra estancia no está bien la cosa, el fuego ya debe de haber quemado unas 1.200 has de bosques y pasturas; se ha trabajado con muchas máquinas topadoras, autobombas y camiones cisterna, cortes de fuego y hoy (por el lunes) con avión hidrante”, relató a Clarín Rural el propietario del establecimiento Carlos Henninger que ayer, hasta altas horas de la noche, junto a un gran número de brigadistas y vecinos, luchaba contra el voraz incendio .
“He sido bombero voluntario y trabaje en cinco incendios forestales pero este que me toca padecer es uno de los más grandes y en el que mayor impotencia he sentido. Veo mi campo y no lo puedo creer… Tantos esfuerzos en mis 35 años de poseerlo se van, se pierden“, expresó Henninger con tristeza.
Hasta anoche, el trabajo de brigadistas, bomberos y vecinos había evitado que el incendio tome las viviendas. “Hemos evacuado nuestra base de operaciones en lo que era el aserradero rodeados por el fuego. Los cortafuegos se hicieron como para proteger las casas y galpones de la estancia”, contó el productor.
“Debo resaltar la gran ayuda de voluntarios de Ushuaia y Río Grande, la de las personas y las empresas que nos enviaron sus máquinas, camiones cisternas, víveres, combustibles, medicamentos, ropa, agua y los constantes apoyos morales por los medios,también a toda la familia, los amigos, colegas estancieros y la Asociación Rural de Tierra del Fuego, con quienes trabajamos codo a codo, acercaron su aporte técnico, herramientas, motobombas, mangueras para que estos baluartes desinteresados traten, con esfuerzo, de proteger su terruño”, destacó Henninger.
La Reserva Corazón de la Isla tiene una superficie de 100.000 hectáreas y alberga un bosque nativo añoso con árboles de hasta 40 metros de altura y de entre 200 y 600 años. Además, protege turbales, una porción ecotono y resguarda un complejo sistema de aguas. La reserva comprende la parte argentina del lago Deseado, los lagos Chepelmut, Yehuin y Yakush. Asimismo, es hábitat de numerosas aves, guanacos y zorros colorados fueguinos.
El fuego comenzó el 30 de noviembre en la reserva y todavía no han podido detenerlo. Según se indica, un pescador que se encontraba en el lugar encendió una fogata en una zona prohibida y fue el causante de lo que ya se considera una catástrofe en la provincia.
Con la sequía y los intensos vientos del sur, las llamas se extendieron rápidamente y consumieron más de 9.000 hectáreas (hasta el lunes 12), acorralando a la estancia Los Cerros donde, durante la medianoche de ayer, el fuego ingresó en el campo aunque las viviendas se mantenían a salvo. Afortunadamente, en las cercanías, en la zona de La Rinconada y en la estancia Carmen, ninguna casa está comprometida, según informó el Gobierno de la provincia.
“El temor es que para mañana pronostican una rotación del viento que soplará a 70 kilómetros por hora con ráfagas de 80 a 90, el fuego no está controlado y venimos de años muy secos. Tendría que llover durante 20 días para estar al mismo nivel que otros años. Entonces, cuando el fuego salga del bosque y agarre el pastizal, no lo parás más”, explicó Lucila Apolinaire, presidente de la Asociación Rural de Tierra del Fuego. “Nunca hubo una sequía así, realmente es preocupante; el cambio climático es un hecho y lo preocupante es que el ser humano no pueda planificar y prever, la situación es grave”, agregó. Además, “no nevó lo suficiente y cada vez hay más viento, durante todo el año, ya no solamente en verano”, señaló.
De acuerdo con la dirigente, la falta de buenas comunicaciones en la isla complicó las cosas y demoró el combate del fuego. “Para cuando se dio aviso del foco que comenzó el pescador en la Reserva, ya se había extendido”, dijo.
En Tierra del Fuego hay 40 productores agropecuarios que, actualmente, se dedican predominantemente a la ganadería ya que desde hace 30 años, el problema creciente de los perros salvajes que atacan a las majadas de ovinos -animales que antes ocupaban la mayor superficie en los establecimientos- hizo que las ovejas desaparezcan. Para esa reconversión, los productores tuvieron que hacer importantes inversiones en infraestructura y genética. Hoy, se contabiliza un rodeo provincial de 60.000 vacunos Hereford.
Los equipos de la Dirección Provincial de Manejo del Fuego; el Servicio Nacional de Manejo del Fuego (SNMF); Bomberos Voluntarios; Guardaparques provinciales; Defensa Civil y Policía Provincial continuaban este lunes el combate contra los incendios mientras se registraba un foco secundario en cercanías de La Rinconada que requirió el trabajo de varias brigadas y de medios aéreos a fin de proteger las viviendas del lugar. Desde este fin de semana, también se permitió que las máquinas de los aserraderos de la región se sumen para hacer cortafuegos. Entretanto, proseguían las tareas de monitoreo en esa zona y en varios sectores de Río Claro.
En base a lo observado por el personal técnico, por el comportamiento del incendio y la situación meteorológica, se dispuso que la mayoría de los recursos se destinen a atender particularmente la Isla Guanaco y el sector aledaño a la estancia Los Cerros. El secretario de Protección Civil de la provincia, Daniel Facio, indicó que en esa zona “se continúan las acciones en base a la prioridad de preservar la vida; cuidar los bienes y mitigar el impacto del incendio”.
En la Reserva Corazón de la Isla vienen trabajando dos helicópteros con helibalde y tres aviones hidrantes. “
Mientas que en en el barrio La Rinconada, ayer se registraba un foco secundario a 600 metros aproximadamente en uno de sus límites sur, donde más de 60 personas trabajaban sin necesidad de evacuación de los habitantes.
Por otro lado, en el sector del Centro de Guardaparques, se avanzaba con maquinaria pesada debido a que el frente es grande y no es seguro para el ingreso de personas.
De acuerdo con el Gobierno de Tierra del Fuego, en la medida que la meteorología lo permita, se reforzarán las tareas con medios aéreos. Para los días martes y miércoles, el Servicio Meteorológico Nacional adelantó que el viento soplará mayormente del cuadrante oeste con ráfagas de entre 50 a 70 kilómetros por hora, lo cual podría complicar aún más la grave situación.
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